Juan Fernando Álvarez Céspedes
juan.alvarez29@udea.edu.co
Instituto de Filosofía
Universidad de Antioquia
Algunas de las capacidades cognitivas que más usamos a diario son la percepción, la memoria y la imaginación episódicas. Buena parte de nuestro tiempo (querámoslo o no) nos la pasamos viendo, oliendo, degustando, escuchando o tocando cosas. Recurrentemente recordamos nuestros episodios pasados e imaginamos posibles episodios futuros en los que estamos involucrados. Pero ¿qué relación puede haber entre capacidades aparentemente tan distintas? Alguien que se tome en serio la pregunta podría decir —como probablemente afirmarían los filósofos mal llamados “empiristas” del siglo XVII— que la percepción ofrece la información necesaria para recordar e imaginar. Así, la percepción se ha entendido como aquella capacidad que provee la información básica a partir de la cual recordamos, imaginamos e incluso conocemos.
John Locke dijo en 1689 que la percepción es “el primer paso y grado hacia el conocimiento, y la puerta de entrada de todos sus materiales” (II, X, §15). Esta idea de la percepción como capacidad que da entrada a los materiales del conocimiento podría ser útil para caracterizar la relación percepción-memoria-imaginación del siguiente modo: la percepción no sólo ofrecería parte de los materiales necesarios para conocer, sino también para recordar e imaginar. Sin embargo, este lenguaje metafórico de los materiales es confuso, pues ¿qué ocurre con la percepción al imaginar y recordar episódicamente? ¿la percepción desaparece o está presente de algún modo? Pondré estos cuestionamientos en otros términos: una de las experiencias que recuerdo con más cariño es la primera vez que vi y toqué el mar. Era finales de 2005 y tenía 11 años. Hoy (finales de 2017) recuerdo vívidamente mi primer contacto con el mar y, asimismo, me imagino en futuras experiencias que involucran el mar. Pero, cuando recuerdo o imagino episodios autobiográficos en los que estoy en el mar ¿qué ocurre con la percepción original del 2005 que me proveyó parte de la información necesaria para recordarme e imaginarme en tal lugar?
Un planteamiento que permitiría responder las preguntas anteriores procede de la “hipótesis de la simulación constructiva-episódica” (Schacter & Addis, 2007; Suddendorf & Corballis, 2007; De Brigard 2014a, 2014b; Michaelian, 2016). De acuerdo con esta hipótesis, no hay diferencias fundamentales entre la memoria y la imaginación episódicas, sino que ambas son parte de una misma capacidad de “viajar mentalmente en el tiempo”. Dicho de manera más precisa, la hipótesis de la simulación constructiva-episódica plantea que hay una función importante de la memoria consistente en permitir simular o imaginar episodios futuros. Por un lado, esta hipótesis propone que la memoria reconstruye experiencias pasadas, en lugar de preservarlas; por otro lado, propone que la imaginación recombina flexiblemente ciertos elementos codificados de experiencias pasadas.
Los distintos filósofos y psicólogos que han propuesto esta hipótesis de la simulación constructiva-episódica no han dejado claro qué ocurre con la percepción en la memoria y la imaginación, aunque hay elementos en esta hipótesis que permiten entender de una manera específica la relación entre percepción, memoria e imaginación. A mi juicio, esa manera específica es la siguiente: en principio, las experiencias perceptuales sí proveen la información que codifica la memoria, y que luego usa flexiblemente la imaginación; pero, hasta ahí no llegan las experiencias perceptuales, estas experiencias deben reconstruirse de cierto modo al recordar e imaginar. Dicho de otra manera, nuestras experiencias perceptuales están presentes en la reconstrucción o simulación de nuestras experiencias pasadas y futuras en forma de representaciones que, a su vez, deben ser reconstruidas. Este planteamiento lo denomino la hipótesis de la reconstrucción perceptual.
Usando esta hipótesis para responder las preguntas que suscita el caso de ver, recordar e imaginar el mar, se puede decir que lo que ocurre es que mi experiencia perceptual primera con el mar constituye un conjunto de representaciones nuevas, que deben entenderse como formando patrones representacionales. Estos patrones se tratan de reconstruir cuando recuerdo el episodio pasado en cuestión o cuando simulo un episodio personal futuro en el mar. En suma, la percepción nos provee materiales necesarios para recordar e imaginar nuestros episodios pasados y futuros respectivamente, y esos materiales son patrones representacionales que resultaron, en este caso, de mi experiencia perceptual original del mar.
Como dije, esta hipótesis no es del todo original, debido a que se halla implícitamente sugerida, por lo menos, en: Schacter & Addis (2007) y De Brigard (2014a). Asimismo, mediante un estudio anatómico, Zeidman & Maguire (2016) parecen sugerir un planteamiento similar a tal hipótesis, pues sostienen que hay evidencia empírica como para sostener que el cerebro crea representaciones del mundo y el ser humano usa esas representaciones para percibir, para re-experimentar episodios del pasado (o recordar episódicamente) y para pre-experimentar episodios futuros (o imaginar episódicamente). No obstante, la hipótesis de la reconstrucción perceptual debe precisarse aún más y tal es el objetivo de mi presentación del próximo 31 de octubre en la “Jornada de filosofía de la mente”, a la cual están cordialmente invitados e invitadas.
Referencias
De Brigard, F. (2014a). Is memory for remembering? Recollection as a form of episodic hypothetical thinking. Synthese, 191(2), 1–31.
De Brigard, F. (2014b). The Nature of Memory Traces. Philosophy Compass, 9(6), 402–414.
Locke, J. (2013). Ensayo sobre el entendimiento humano. México, D. F.: Fondo de Cultura Económica.
Michaelian, K. (2016). Against discontinuism: Mental time travel and our knowledge of past and future events. In K. Michaelian, S. B. Klein, & K. K. Szpunar (Eds.), Seeing the Future: Theoretical Perspectives on Future-Oriented Mental Time Travel (pp. 62–92). Oxford: Oxford University Press.
Schacter, D. L., & Addis, D. R. (2007). The cognitive neuroscience of constructive memory: remembering the past and imagining the future. Philosophical Transactions of the Royal Society B: Biological Sciences, 362(1481), 773–786.
Suddendorf, T., & Corballis, M. (2007). The evolution of foresight: What is mental time travel, and is it unique to humans? Behavioral and Brain Sciences, 30(3), 299–313.
Zeidman, P., & Maguire, E. A. (2016). Anterior hippocampus: the anatomy of perception, imagination and episodic memory. Nature Reviews. Neuroscience, 17(3), 173–182.