Episodio 3: todo lo que sucede, ¿sucede por una causa o razón?

Material complementario del episodio 3 de la serie “Problemas de la ciencia y su historia” del Podcast del Instituto de Filosofía.

En esta publicación encontrará el material complementario del episodio 3 “Todo lo que sucede, ¿sucede por una causa o razón?” de la serie “Problemas de la ciencia y su historia” del Podcast del Instituto de Filosofía.

La serie “Problemas de la ciencia y su historia” del Podcast del Instituto de Filosofía de la Universidad de Antioquia trata sobre temas de relevancia en la historia de la ciencia, la historia de la filosofía y la historia del conocimiento en un sentido amplio, convocando a investigadores e investigadoras para conversar sobre sus trabajos en desarrollo. Junto con cada episodio encontrarán, en la información del Podcast, un vínculo que los conducirá a una lista de lecturas para ampliar la conversación.

La idea de que lo que acontece tiene una razón o causa puede parecer trivial. Sin embargo, se trata de una idea central, poderosa y controversial en la historia de la filosofía que subyace a un principio conocido como el principio de razón suficiente. En términos generales, el principio de razón suficiente estipula que todo debe tener una razón, causa o fundamento. El principio, sin embargo, comporta problemas y matices sobre los que nos ocuparemos hoy.

En su forma más simple, el principio establece que para cada fenómeno debe haber una razón suficiente por la cual el fenómeno es el caso, es decir, por la cual el fenómeno se da o se produce. En su versión más fuerte, el principio implica que no hay fenómenos o hechos incausados o “brutos”, es decir, que ante todo fenómeno o hecho podemos demandar una razón o causa que lo explica (o que lo produce). No importa que no podamos acceder a las causas o razones que producen un fenómeno, pues en su versión más fuerte el principio nos permite suponer que debe haber tal. Versiones más restringidas del principio limitan el tipo de cosas acerca de las cuales podemos establecer explicaciones, por ejemplo, podemos restringirlo únicamente a entidades reales y excluir, por ejemplo, las posibles. También se puede restringir lo que entendemos por el segundo término del principio, es decir, aquello que provee explicación o que opera como fundamento.

Para aclarar el asunto, pensemos en lo que implica la negación del principio de razón suficiente. Cuando negamos este principio, estamos afirmando que algún hecho o fenómeno puede existir sin fundamento, causa o razón. Es decir, se puede afirmar que algo existe sin que otra cosa lo produzca. De este modo, por ejemplo, se estaría afirmando que algo puede comenzar a existir sin causa.

En la filosofía de la modernidad temprana, el principio de razón suficiente desempeñó un papel fundamental, en particular en Spinoza y en Leibniz. En su Ética demostrada según el orden geométrico (1677), Spinoza afirmó que “Lo que no se puede concebir por otro, se debe concebir por sí” (I, a2), es decir que todo se puede concebir. De este modo, Spinoza parece estar afirmando que todo es explicable. Inmediatamente después, Spinoza afirma que “De una determinada causa dada se sigue necesariamente un efecto y, al contrario, si no se da ninguna causa determinada, es imposible que se siga un efecto” (I, a3). Esto parecería querer decir que todo lo que existe tiene una causa: pues sin causa no se seguiría ningún efecto. No obstante, la formulación tradicional del principio de razón suficiente se atribuye a Leibniz quien, además de llamarlo por este nombre, desarrolló el principio como elemento estructural de su filosofía. En su Monadología (1714), Leibniz presentó el principio de razón suficiente junto con el principio de no contradicción como los fundamentos del razonamiento. Según esta formulación, por este principio “consideramos que no podemos encontrar un hecho verdadero o existente o afirmación verdadera sin que haya una razón suficiente por la cual es de tal modo y no de otro, aunque las más de las veces estas razones nos sean desconocidas” (M, 32). Así las cosas, el principio  no parece restringirse a las razones que hacen de una proposición verdadera, sino que se aplican también a las que Leibniz denomina “verdades de hecho”.

Así como a Leibniz se le ha concebido como el principal formulador y sistematizador de este principio, se ha concebido al filósofo escocés David Hume como uno de sus principales detractores. La separación de Hume del principio de razón suficiente parece estar implicada en su crítica a la llamada “conexión necesaria”. En una versión estándar de la filosofía de Hume, se afirma que según este la relación entre la causa y el efecto no es una “conexión” necesaria sino que se produce de la conjunción habitual que sucede en nuestra experiencia cuando dos acontecimientos se repiten frecuentemente. En otras palabras, que nuestra idea de que la causa y el efecto tienen una relación de necesidad o producción es, en realidad, el resultado de que constantemente estamos expuestos a que dos acontecimientos (uno que denominados causa y otro efecto) aparecen sucesivamente a nuestra experiencia. Sin embargo, no es claro si este rechazo a la conexión necesaria implica también un rechazo al principio de razón suficiente.

Material complementario al Podcast:

Allison, H. E. (2008a). Custom and reason in Hume: A Kantian reading of the first book of the Treatise. Clarendon Press: http://site.ebrary.com/id/10281938

Allison, H. E. (2008b). “Whatever begins to be must have a cause of existence”: Hume’s Analysis and Kant’s Response. Philosophy and Phenomenological Research76(3), 525–546. https://doi.org/10.1111/j.1933-1592.2008.00156.x

Anderson, A. (2020). Kant, Hume, and the interruption of dogmatic slumber. Oxford University Press.

Carraud, V. (2002). Causa sive ratio: La raison de la cause, de Suarez à Leibniz. Presses Universitaires de France.

Della Rocca, M. (2018). Playing with Fire: Hume, Rationalism, and a Little Bit of Spinoza. In The Oxford Handbook of Spinoza. Oxford University Press.

Look, B. C. (2011). Grounding the Principle of Sufficient Reason: Leibnizian Rationalism and the Humean Challenge. In C. Fraenkel, D. Perinetti, & J. E. H. Smith (Eds.), The Rationalists: Between Tradition and Innovation (pp. 201–219). Springer

Pruss, A. R. (2006). The Principle of Sufficient Reason: A Reassessment. Cambridge University Press. 

Episodio 3: ” Todo lo que sucede, ¿sucede por una causa o razón?”

Serie “Problemas de la ciencia y su historia”

Podcast Instituto de Filosofía

Guión y realización: Sergio Orozco-Echeverri (UdeA)

Producción: Laura Echandía, Comunicaciones Instituto de Filosofía

Invitado: Jerónimo Narváez Cano (Université du Québéc à Montreal).